Airbnb dijo que prohibiría permanentemente las fiestas en sus propiedades en todo el mundo, casi dos años después de que el servicio de viviendas compartidas emitiera una restricción temporal a las grandes reuniones.
“La prohibición temporal ha demostrado ser efectiva”, dijo la compañía en un comunicado el martes, y agregó que “estamos codificando oficialmente la prohibición como nuestra política”. La prohibición permanente entró en vigor ese día.
La medida se produce después de que Airbnb prohibiera en 2019 las reuniones de “invitación abierta” anunciadas en las redes sociales, así como las “casas de fiestas crónicas” que se habían convertido en molestias para el vecindario. Sin embargo, el límite de ocupación de 16 personas que adoptó Airbnb en el verano de 2020, cuando anunció una prohibición temporal de “todas las fiestas y eventos”, se levanta bajo la nueva política, dijo la compañía.
Los clientes que infrinjan las reglas podrían enfrentar consecuencias, como la suspensión de sus cuentas o la prohibición permanente de la plataforma. En 2021, Airbnb dijo que suspendió a más de 6600 clientes por violar la prohibición de fiestas.
Las quejas sobre las fiestas estridentes en las casas reservadas a través del servicio se acumularon a lo largo de los años, y culminaron con la prohibición temporal que la empresa aplicó en agosto de 2020. En ese momento, los inquilinos usaban estas casas para congregarse en grandes grupos mientras los restaurantes y bares estaban cerrados. debido a las restricciones de la pandemia.
“Con el tiempo, la prohibición de las fiestas se convirtió en mucho más que una medida de salud pública”, dijo la compañía. “Se convirtió en una política comunitaria fundamental para apoyar a nuestros anfitriones y sus vecinos”.
Airbnb dijo que desde que impuso la prohibición temporal, ha visto una caída del 44 por ciento año tras año en la tasa de informes de fiestas. Sin embargo, los críticos de la compañía han señalado que la disminución de los informes se debe a que las restricciones a las reuniones en bares, restaurantes y otros lugares se han aflojado desde los primeros meses de la pandemia.
“La prohibición ha sido bien recibida por nuestra comunidad anfitriona y hemos recibido comentarios positivos de los líderes comunitarios y funcionarios electos”, dijo la compañía.
Covid-19 no fue el único riesgo de seguridad en estas fiestas. Al menos 27 tiroteos se conectaron a alquileres de Airbnb entre marzo y octubre de 2020 en los Estados Unidos y Canadá.
Las reuniones también fueron perjudiciales para los vecinos. En 2019, Airbnb introdujo una línea directa disponible las 24 horas llamada Línea de apoyo al vecindario que los vecinos podían usar para comunicarse con la empresa sobre casas o huéspedes problemáticos.
Jessica Black, líder de Texas Neighborhood Coalition, un grupo que trabaja para limitar los alquileres a corto plazo en todo Texas, dijo que le preocupaba que Airbnb hubiera eliminado el límite de capacidad de 16 personas. La basura, el ruido y el estacionamiento se vuelven problemáticos, dijo, cuando hay más gente de lo normal en un vecindario residencial.
“Las casas residenciales no fueron diseñadas ni destinadas a ser lugares de eventos”, dijo la Sra. Black. “Es diferente a tener un vecino. Son extraños, así que no vas a llamar a la puerta a medianoche. No sabes quiénes son.
En mayo, Airbnb anunció que prohibiría a los huéspedes sin un historial de críticas positivas hacer reservas de una noche en fines de semana festivos durante el verano, como el Día de los Caídos y el Día de la Independencia.
Si bien “el simple hecho de no tener aún reseñas no significa que un invitado esté tratando de organizar una fiesta”, dijo la compañía en mayo, “esta es una compensación que estamos dispuestos a hacer en aras de la confianza y la seguridad. ”
Karen Xie, profesora de la Universidad de Denver que investiga la industria de alquileres a corto plazo, dijo el miércoles que no estaba sorprendida de que Airbnb hubiera hecho permanente la prohibición de las fiestas. La compañía, dijo el profesor Xie, está “cansada de lidiar con reclamos de anfitriones y la liquidación de costos por daños de fiestas en casas”.
“Casi todos los anfitriones que están dispuestos a abrir sus hogares a los invitados odian las fiestas en casa”, dijo.