En comentarios explosivos y detallados, Britney Spears condenó apasionadamente el miércoles el arreglo legal que le da a otros control sobre sus finanzas personales, pidiendo a un juez que lo detenga.
“Le dije al mundo que estoy feliz y bien”, dijo Spears en un tribunal de Los Ángeles. “Estoy traumatizado. No estoy feliz. No puedo dormir “.
Desde 2008, la estrella del pop ha estado bajo tutela, una herramienta legal anteriormente poco conocida para proteger las finanzas de una persona considerada mentalmente incapacitada para manejarlas. En los últimos años, la conciencia pública y las críticas al acuerdo han aumentado, y los fanáticos, a menudo usando el hashtag #FreeBritney, se preguntan por qué no se debe permitir que una mujer profesional exitosa controle el dinero que gana.
El miércoles marca la primera vez que Spears, de 39 años, habla públicamente sobre la situación. Hablando de forma remota por teléfono, criticó a su familia y abogados, pintando una imagen de sí misma como una mujer encarcelada dentro de su propia vida. La tutela, dijo Spears, es “abusiva” y le impide vivir una “vida plena”.
“Estoy tan enojada, es una locura”, dijo.
En un momento, Spears acusó a sus tutores de negarse a llevarla a un médico para que le quitara un dispositivo anticonceptivo para que pudiera quedar embarazada.
“Quiero poder casarme y tener un bebé. Me dijeron que no me puedo casar ”, dijo, según CNN. Su novio, Sam Asghari, había publicado una foto de él con una camiseta de #FreeBritney en las redes sociales horas antes.
“Esta tutela me está haciendo mucho más daño que bien”, dijo Spears. “Merezco una vida”.
Spears también dijo que le recetaron litio en contra de su voluntad, y que era tan fuerte que “se sentía borracha” y no podía mantener una conversación “sobre nada”.
“Me tenían con seis enfermeras diferentes”, dijo.
La herencia de Spears ha sido puesta en manos de su padre, Jamie Spears, quien se desempeña como curador conjunto junto con un abogado. La cantante quiere que la corte elimine permanentemente a su padre de la tutela, dejando a su abogada Jodi Montgomery al mando.
El alcance de las restricciones en la vida de Spears quedó al descubierto esta semana en The New York Times, que informó que su padre tiene la última palabra incluso sobre los detalles más minuciosos, como si puede pintar los gabinetes de su cocina. Según los informes, Jamie Spears se refirió a su hija como “un caballo de carreras que hay que manejar como tal”.
Para Britney Spears, el camino hacia la tutela comenzó con una serie de crisis de salud mental a mediados de la década de 2000. Fue hospitalizada involuntariamente dos veces en enero de 2008 tras una difícil disputa por la custodia de sus dos hijos con su exmarido Kevin Federline, a quien un juez le concedió la custodia exclusiva.
Desde entonces, Spears se ha embarcado en cuatro giras mundiales y completó una residencia en Las Vegas, donde los fanáticos compraron 900,000 boletos para casi 250 presentaciones.
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