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Una ciudad de California tiene un problema de asesinatos, específicamente uno relacionado con la caca de miles de cuervos que se posan en el centro de la ciudad.
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“Las calles están básicamente plagadas de caca de cuervo”, dijo Larry Klein, alcalde de Sunnyvale, al New York Times.
Si bien los cuervos se han posado en la ciudad durante años, la población de aves ha crecido durante la pandemia, y su excremento representa un peligro para la salud de los restaurantes y negocios.
“Entraré a menos que esté bajo un paraguas”, dijo Frank Hampton, residente de Sunnyvale, a ABC7 News. “La cosa es que no están aquí durante el día, es solo por la noche. Es justo cuando comienzan a aparecer cuando se pone el sol”.
Pero el alcalde está intensificando la batalla con las aves con el uso de láseres de $20, que dijo que son más rentables que las tácticas anteriores utilizadas para dispersarlas.
“Hemos probado varias cosas. En el pasado, hemos tenido halcones, hemos puesto reflectores en nuestros árboles y nada parece ayudar”, dijo Klein a ABC7 News.
“Es mucho mejor que gastar cientos de dólares para lavar las aceras cada pocas semanas”, dijo.
Durante el proyecto piloto, que comenzará a fines de mes, los trabajadores de la ciudad harán brillar un láser verde a los cuervos una hora por la noche durante tres semanas, dijo Klein al New York Times.
La Sociedad Protectora de Animales de los Estados Unidos ha considerado seguro el uso de láseres para dispersar aves.