A estas alturas, probablemente hayas visto, o al menos escuchado, sobre el regreso de Hamilton High School, que es sin duda uno de los mejores en la historia del fútbol. Abajo 24-7 con 1:10 en el reloj, lo que siguió fue una de las series de eventos más dramáticas e improbables que probablemente verás.
Uno de los acabados más locos que jamás hayas visto …
Hamilton HS borró un déficit de 24-7 con 1:10 por jugar.
Final: Hamilton 25, obispo Gorman 24pic.twitter.com/BvUwb56Ozj
– La red de acción (@ActionNetworkHQ) 18 de septiembre de 2021
Al patear un gol de campo para iniciar los procedimientos, Hamilton redujo el marcador a 24-10 antes de recuperar una patada lateral, anotar un touchdown, antes de hacerlo todo de nuevo, y culminar el segundo con una conversión de dos puntos en una carrera de mariscal de campo.
Ahora, lo que probablemente no sabías es que parte de esta secuencia contenía una pelota de fútbol empapada de vómito. Sí, eso no fue un error tipográfico, lo siento mucho. No haga clic si siente aprensión por el vómito.
Los nervios afectan a todos de diferentes maneras, y este fue sin duda el pasaje de juego más estresante que Hamilton tendrá en toda la temporada. Sin embargo, me ha dejado preguntándome cómo influyó el vómito en la pelota, porque soy así de raro.
¿Crees que todo salió volando cuando la bola se dirigió en espiral hacia su objetivo? ¿Se hizo resbaladizo por eso? ¿El receptor notó que había algo extraño cuando lo atrapó, o era demasiada adrenalina para notar que la pelota estaba cubierta de fluidos corporales? Realmente te hace pensar. O al menos hace me Pienso, porque me gusta eso raro.