La escala de la crisis de inundaciones que se desarrolla en Sydney está en otro nivel.
La ciudad no solo está siendo golpeada por lluvias casi continuas, sino que algunos suburbios ya han tenido múltiples inundaciones este año.
Está pasando factura a la comunidad.
Barbara Mascoll ha vivido en la ciudad de Windsor en Sídney por 35 años Hablando con nosotros en su jardín delantero, dijo que es difícil llegar a las tiendas porque necesita un bote para salir.
“Estuve despierta toda la noche, todavía no he dormido nada, así que todavía estoy en bata”, nos dijo.
Vimos una organización benéfica local entregando alimentos a la Sra. Mascoll y sus vecinos.
Todos los días están entregando cientos de bolsas de suministros a las familias afectadas por las inundaciones.
“Somos una comunidad resiliente, pero creo que todos están un poco cansados de las inundaciones”, dice Linda Strickland, directora ejecutiva de Hawkesbury’s Helping Hands.
“En este momento se trata de salvar vidas y asegurarse de que las personas tengan comida en sus mesas”.
Eso incluye la vida silvestre también.
No todos los días ves a un canguro en un kayak siendo salvado por un rescatista.
Pero Josh Robinson, fundador de Crisis Animal Response & Evacuation (CARE) en Nueva Gales del Sur, y Harley Stewart han estado sacando su bote y kayak para salvar animales de granja, mascotas y vida silvestre varados en las inundaciones.
Josh Robinson (izquierda) y Harley Stewart han estado rescatando animales varados en las inundaciones.
“Salimos todos los días rescatando animales de situaciones porque las personas han tenido que salir tan rápido que simplemente los han dejado atrás”, dijo.
En otra área de Windsor, algunos propietarios se quedaron a pesar de que las inundaciones arrasaron la planta baja de su casa de dos pisos.
Sarah Kennedy compró su propiedad frente al río hace un año. Desde entonces ha experimentado inundación tras inundación.
La familia también posee una granja de césped ahora completamente bajo el agua, lo que le costó a la empresa más de £ 1 millón.
A pesar de las dificultades, la Sra. Kennedy dice que no viviría en ningún otro lugar, pero admite que las inundaciones son angustiosas.
“No es una gran sensación, estás nervioso porque va a entrar. Esta es la primera vez que está en la casa”.
El gobierno de Nueva Gales del Sur (NSW) ha declarado 23 regiones como zonas de desastre natural, anticipando un largo camino de regreso a la normalidad.
Representante del consejo de Blacktown Moninder Singh
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El representante del Consejo de Blacktown, Moninder Singh, dice que su comunidad está “destrozada”.
“La carretera está totalmente bloqueada. Eso significa que nadie puede entrar al pueblo, ni salir”, dice. “No hay servicios disponibles en esta etapa”.
Australia es considerado como un país en la primera línea de la emergencia climática.
Solo tiene que conducir 45 minutos desde el centro de Sydney para ver cómo esta crisis global convierte la vida de decenas de miles de personas en un desastre.