“Aunque la producción mensual se recuperó durante el trimestre a partir de la contracción de julio, es más probable que refleje un impulso temporal de la flexibilización de las restricciones, en lugar de una mejora significativa en la trayectoria de crecimiento subyacente del Reino Unido.
“La hospitalidad, las artes y la recreación y la salud registraron las mejoras más importantes a medida que la reducción de las restricciones de distanciamiento social levantó la actividad. Por el contrario, la producción de la construcción disminuyó en el tercer trimestre debido a que las graves interrupciones de la cadena de suministro debilitaron su capacidad para completar los pedidos.
“La inversión empresarial sigue decepcionantemente por debajo de los niveles prepandémicos, luego de un modesto repunte en el trimestre y, como tal, sigue siendo el punto negro de la recuperación, lo que limita la capacidad del Reino Unido para aumentar la productividad y generar una economía de salarios altos y sostenibles.
“Es probable que la desaceleración del tercer trimestre sea el comienzo de un período sostenido de crecimiento lento, ya que la escasez de personal, la interrupción de la cadena de suministro y el aumento de la inflación sofocan cada vez más la producción económica.
“En consecuencia, sobre una base trimestral, es probable que la economía del Reino Unido regrese a su nivel anterior a la pandemia el próximo año, detrás de muchos de nuestros competidores internacionales.
“Con los vientos en contra que enfrenta la economía del Reino Unido en crecimiento, advertiríamos al Banco de Inglaterra que no aumente las tasas de interés a corto plazo para evitar desestabilizar una recuperación que ya es frágil”.
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