Tara Linne, vocera de la Oficina del Inspector General, dijo que la oficina recibió una queja de que un paquete que contenía cheques y contribuciones para la campaña de Stefanik llegó sin su contenido. La oficina inició de inmediato una investigación, a pesar de que se les dijo a los funcionarios que el Servicio Postal había devuelto los cheques que faltaban anteriormente, dijo Linne.
“Para octubre, nuestra investigación no había identificado evidencia de participación de los empleados”, dijo Linne en un correo electrónico. “Alegaciones adicionales surgieron esta semana”.
Linne dijo que el caso parece estar dentro de la jurisdicción del Servicio de Inspección Postal de EE. UU., que maneja las denuncias de robo de correo por parte de personas que no son empleados, y no de la Oficina del Inspector General, que investiga la mala conducta de los empleados.
Cuestionó la afirmación de la campaña de Stefanik de que no tomó las acusaciones en serio. “Nos tomamos muy en serio nuestra misión y responsabilidad de investigar el fraude, el despilfarro y el abuso. Continuaremos trabajando con nuestros socios encargados de hacer cumplir la ley para identificar y responsabilizar a quienes se aprovechan de la confianza del público en nuestro sistema postal”, dijo Linne.
Toner le pide a DeJoy que proporcione una lista de los pasos que está tomando el Servicio Postal para investigar los robos y qué hará para garantizar que la campaña de Stefanik no se convierta en víctima del robo de correo en el futuro.