Al parecer, una madre degolló a sus tres hijos alegando que “nunca había vivido un día feliz en su vida”.
Selma Cice, de 27 años, está acusada de apuñalar a sus hijos Mehmet Emin, de 10, Semanur, de ocho, y Mahmut, de cuatro, con un cuchillo.
La mujer afirmó que quería evitarles a sus hijos el mismo sufrimiento por el que había pasado, por lo que los mató en su casa en el distrito de Yuregir en la provincia de Adan, en el sureste de Turquía.
Algunos vecinos intentaron ingresar a la propiedad cuando escucharon gritos provenientes de la casa, pero la puerta estaba cerrada.
Luego llamaron al esposo de Cice, Cabbar, y cuando entró a la casa, se encontró con que sus tres hijos habían sido asesinados.
Su esposa estaba viva, pero se había lesionado después del incidente del 21 de octubre de 2018.
Los servicios de emergencia acudieron al lugar y llevaron a Cice al hospital en ambulancia.
Según el periódico turco Gunboyu, la mujer, que fue tratada en cuidados intensivos, le dijo a la policía que no había visto salida.
“Nunca he tenido un día feliz en mi vida”, dijo. “Toda mi vida ha pasado por dificultades extremas. Llevo mucho tiempo pensando en suicidarme “.
La madre dijo que había decidido matar a sus hijos para evitarles el mismo sufrimiento.
Los cuerpos de Mehmet Emin, Semanur y Mahmut fueron enterrados uno al lado del otro en el cementerio familiar en el barrio de Gecitli después de la autopsia.
En una audiencia en el 9º Tribunal Penal Superior de Adana, el fiscal pidió a Cice que fuera condenado a tres veces la cadena perpetua agravada por “homicidio deliberado” después de considerar todas las pruebas del caso.
Según el Código Penal turco, la cadena perpetua en Turquía es de 24 años de prisión, mientras que la cadena perpetua agravada es lo que se introdujo para reemplazar la pena de muerte.
Los presos condenados a cadena perpetua con agravantes pueden recibir la libertad condicional solo después de cumplir al menos 36 años, o 40 años si se les da más de una sentencia.
En su defensa, Cice, quien afirmó que su esposo y su familia utilizaron la violencia contra ella, dijo: “Lamento lo que hice. No es normal que mate de repente a mis hijos. Soy víctima de lo que he pasado. Estoy psicológicamente dañado “.
A solicitud del abogado del acusado de preparar una defensa con respecto a la opinión, la junta del tribunal decidió continuar la detención de la mujer y aplazó la audiencia para una fecha posterior.
Este artículo apareció originalmente en The Sun y se volvió a publicar con permiso.
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