Un alto oficial militar ucraniano jugó un papel clave en el sabotaje del gasoducto Nord Stream en el Mar Báltico el año pasado, según una investigación conjunta publicada hoy por el Washington Post y Der Spiegel en Alemania.

Fuentes familiarizadas con el asunto dijeron a The Washington Post y Der Spiegel que el coronel de las fuerzas de operaciones especiales ucranianas Roman Chervinsky era el “coordinador de la operación de sabotaje del gasoducto Nord Stream”.

La Agence France-Presse informó que los dos medios de comunicación citaron a funcionarios en Ucrania y otras partes de Europa y a personas familiarizadas con la operación, que hablaron bajo condición de anonimato.

El Post escribió que Schervinsky supervisó la logística y comandó un equipo de seis personas que alquilaron un velero con identidades falsas y luego utilizaron equipo de buceo para colocar explosivos en el oleoducto.

El Post también mencionó que Severinsky no fue el planificador de esta operación ni actuó solo, sino que actuó bajo instrucciones de funcionarios ucranianos.

A finales de septiembre del año pasado se descubrieron cuatro fugas en dos oleoductos submarinos Nord Stream cerca de la isla danesa de Bornholm. Antes, la agencia de predicción sísmica midió dos explosiones submarinas.

Los gasoductos se han convertido en un foco de tensiones geopolíticas después de que Moscú cortara el suministro de gas natural a Europa en presunta represalia por las sanciones occidentales por su invasión de Ucrania.

Según distintas fuentes, Ucrania, Rusia o Estados Unidos fueron los responsables de la explosión, pero todas las partes lo han negado.

Schrevinsky también negó, a través de su abogado, haber desempeñado algún papel en el incidente del sabotaje del oleoducto.