El fenómeno de tener un orgasmo durante el entrenamiento en el gimnasioconocido como coreorgasmointriga tanto a los practicantes como a los expertos en ejercicio físico.
Este evento, aunque poco común, ocurre cuando algunas mujeres experimentar el clímax sexual durante el ejercicio físico intenso. Pero ¿qué causa exactamente esta sensación inesperada?
Según la ginecóloga Raquel Magalhães, posgraduada en Sexualidad Humana de la Universidad de São Paulo, la El coreorgasmo se desencadena mediante la estimulación de los músculos del suelo pélvico.junto con la contracción de los músculos abdominales, de la cadera y lumbares.
“Ejercicios como bicicleta, sentadillas y abducciones de piernas pueden provocar fricción directa sobre el clítoris, especialmente cuando la mujer viste ropa ajustada o tejidos finos”, explica.
Esta fricción combinada con un mayor flujo sanguíneo a la región pélvica durante el ejercicio puede provocar un orgasmo.
Sin embargo, la fisioterapeuta Patricia Ferreira Skrotzky, especializada en suelo pélvico del Hospital do Servidor Público Estadual (HSPE), añade que el esfuerzo físico por sí solo no es suficiente para provocar el orgasmo.
“Es la combinación de factores sensoriales y nerviosos, junto con una mayor conciencia corporal, lo que despierta nuevas sensibilidades”, afirma.
Skrotzky destaca que el fenómeno es una señal de que el cuerpo está funcionando bien, con un buen riego sanguíneo y una percepción saludable de los órganos internos. Es más probable que ocurra en mujeres que tienen una fuerte conexión con su cuerpo y están atentas a sus sensaciones físicas.
Frecuencia y sensibilidad
La frecuencia del fenómeno varía de una mujer a otra y depende de factores como la sensibilidad individual, el tipo de ejercicio e incluso la frecuencia de la actividad sexual.
Skrotzky señala que a algunas mujeres les resulta más fácil alcanzar el orgasmo en el gimnasio, pero eso no impide que otras también tengan esta experiencia.
Magalhães también advierte que, en casos de uso abusivo de hormonas masculinas, como el “beauty chip”, puede producirse clitoromegalia, aumentando la propensión al coreorgasmo.
Salud y Bienestar
Ambos expertos coinciden en que no existen problemas de salud asociados al orgasmo durante el entrenamiento, siempre y cuando no sea el objetivo principal de la actividad física. “Ir al gimnasio con ganas de mejorar tu calidad de vida, amor propio y sentirte bien es lo que realmente importa”, afirma la fisioterapeuta pélvica.
Magalhães refuerza la importancia de no asociar el uso de hormonas o suplementos con la intención de aumentar esa sensibilidad, ya que esto puede derivar en problemas de salud.
Lo más importante es, si ocurre, afrontar el fenómeno con naturalidad y aprovechar el entrenamiento para cuidar cuerpo y mente.
¿Qué es el orgasmo?
El orgasmo es el clímax del ciclo de respuesta sexual, caracterizado por intensas contracciones musculares y una sensación de placer seguida de un estado de relajación.
Magalhães destaca que, embriológicamente, hombres y mujeres tienen la misma capacidad de sentir y alcanzar orgasmos, ya que sus genitales se desarrollan desde el mismo origen.
En el caso de las mujeres, la estimulación del clítoris es fundamental para alcanzar el orgasmo, y durante el entrenamiento, ciertos ejercicios pueden estimular sin querer esta zona tan sensible.
¿Por qué el tema sigue siendo tabú?
A pesar de ser una respuesta corporal natural, el coregasmo sigue siendo un tabú para muchas mujeres. La vergüenza o la falta de información sobre el tema pueden generar malestar social.
“Muchas mujeres no se sienten cómodas hablando o incluso reconociendo que experimentan orgasmos durante el entrenamiento”, señala Skrotzky.
Esta renuencia a abordar el tema puede ser un reflejo de las normas culturales y sociales que aún rodean la sexualidad femenina, lo que dificulta la aceptación y comprensión de esta experiencia.
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