La controversia, que desde entonces se ha denominado “spitgate”, fue criticada por Chris poco después, ya que su representante emitió un comunicado diciendo que se trataba de “un intercambio completamente fabricado” y calificó las afirmaciones como “ridículas” y “especulaciones tontas”.
Ahora, en una entrevista con Esquire, Chris confirmó que “Harry no me escupió”, y ofreció alguna explicación sobre la situación.
El actor de 42 años aseguró que su coprotagonista “es un tipo muy amable” y mientras salían del festival de cine todos estaban “pasándolo muy bien en el avión”.
Durante el viaje, Chris se durmió en el avión y su publicista lo despertó diciendo que necesitaba hacer una declaración.