El ministro Ricardo Lewandowski, de Justicia y Seguridad Pública, señaló a sus interlocutores que no quiere crear un enfrentamiento con el Congreso Nacional en torno al proyecto de ley que prevé el fin de la liberación temporal de presos en vacaciones.
Lewandowski será uno de los asistentes con quienes el presidente Luiz Inácio Lula da Silva (PT) consultará antes de decidir la sanción del texto, apenas sea analizado en la Cámara de Diputados.
El ministro aún no se ha pronunciado sobre el contenido del proyecto aprobado este martes (20) por el Senado. Quiere esperar a que finalice la votación en la Cámara y la versión final que será enviada al presidente Lula.
Una vez aprobado el texto, Lewandowski deberá analizar el texto y consultar a las áreas técnicas del ministerio. Los miembros del gobierno ya han comenzado a recopilar información y estudios técnicos que podrían usarse para justificar un posible veto del texto.
A partir de las opiniones y notas técnicas que reciba de sus asistentes, el ministro asesorará al presidente Lula.
Los aliados describen a Lewandowski como alguien que tiene un perfil diplomático, conciliador y discreto. Estas características son vistas por personas cercanas al ministro como una ventaja al tratar con parlamentarios y políticos.
Al mismo tiempo, Lewandowski es jurista garante y fue con ese perfil que trabajó en el Tribunal Supremo Federal. Esta ala de magistrados presta especial atención a los derechos y garantías de los investigados en procesos penales.
En su discurso de toma de posesión, Lewandowski afirmó que no basta con exacerbar las penas previstas en la legislación penal o promover el encarcelamiento masivo, incluso de aquellos con el menor potencial ofensivo.
El ministro también afirmó que no tiene sentido obstaculizar la evolución del régimen penitenciario de los reclusos, porque todos estos factores aumentarían la tensión en los establecimientos penitenciarios y aumentarían el número de personas reclutadas en organizaciones criminales.
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