NOS Noticias•ayer, 16:36
El fontanero de Vlaardingen, que ha sido objeto de ataques más de diez veces, ha sido expulsado de la zona. Ya no se le permite entrar al barrio donde anoche hubo un ataque, ni al barrio donde se encuentra su casa. Además, se explora la posibilidad de ofrecer propinas a las personas que ayuden a las autoridades a encontrar al autor de los ataques.
Así lo decidió el alcalde de Vlaardingen, tras consultar con la policía y el ministerio público, después de que anoche se produjera un incendio en una casa. Esa casa parece estar a nombre de la madre del fontanero, según datos del Registro de la Propiedad que ha solicitado NOS.
Una explosión en esa casa, que está al lado de un garaje del fontanero, provocó un gran incendio en el que resultaron heridos tres vecinos, familiares del fontanero. Hay imágenes del ataque de anoche, afirmó el alcalde de Vlaardingen, Wijbenga. Estos podrán compartirse con el público en una etapa posterior.
Wijbenga calificó el ataque de anoche como un terrible punto bajo en una serie de ataques contra el fontanero:
Wijbenga: “La gente ha escapado de la muerte”
Dice que hará todo lo posible para garantizar que se atrape a la persona que ordenó la serie de explosiones. Según sus palabras, el Ministerio de Justicia gestionará un equipo independiente que intensificará la búsqueda del cliente.
Motivo desconocido
El alcalde ha cerrado varias veces los locales del fontanero tras varios ataques desde abril del año pasado.
Las explosiones causaron mucho malestar. Mucha gente ya no se siente segura. Wijbenga se solidariza con los residentes locales. “Donde quiera que vaya el fontanero, hay una amenaza. Incluso donde estuvo esta semana”. El alcalde dice que entre los residentes locales hay mucho enojo e indignación porque este conflicto se libra a sus espaldas.
No se sabe nada sobre el motivo. El plomero le dijo previamente a AD que no tiene idea de quién está apuntando a él.
Varios sospechosos ya han sido arrestados. El Ministerio Fiscal ha solicitado contra uno de ellos una pena de 30 meses de prisión, 6 de los cuales condicionales. El veredicto es la próxima semana. La semana pasada también comenzó un caso contra un sospechoso menor.