Casi un millón de palestinos huyen de Rafah y el norte de Gaza: –

RAFAH, Franja de Gaza — Más de 900.000 personas han huido de la ciudad de Rafah y zonas del norte de Gaza desde el 6 de mayo, cuando las fuerzas israelíes enviaron avisos de evacuación, dicen las Naciones Unidas.

La ciudad había sido el último refugio en la Franja de Gaza para más de un millón de palestinos desplazados.

A medida que las fuerzas israelíes avanzan, es el escenario del mayor movimiento masivo en siete meses de guerra.

Cargados con mantas y botes de gas, camiones y carros tirados por burros que transportan familias salen de la ciudad. Las carreteras no están pavimentadas y están embarradas, y muchos edificios han sido destruidos por los ataques aéreos israelíes.

Muchos evacuados han sido desplazados cuatro o cinco veces, dicen las Naciones Unidas y las agencias de ayuda, o a veces más. El ejército de Israel ha seguido adelante con sus planes a pesar de las advertencias de Estados Unidos y otros países de que una operación importante devastará a los civiles en Rafah.

El ejército israelí envió tanques a Rafah y anunció que enviaría más tropas terrestres. El viernes, la Corte Internacional de Justicia de las Naciones Unidas en La Haya ordenó a Israel para detener su ofensiva sobre Rafah, aunque no pidió el fin de la ofensiva más amplia de Israel en toda la Franja de Gaza y no tiene poder para hacer cumplir su decisión.

Se pueden escuchar drones en el cielo durante todo el día y, por la noche, los bombardeos sacuden la ciudad, hiriendo y matando a decenas.

Algunos de los heridos en Rafah son enviados al Hospital Kuwaití, uno de los únicos hospitales en funcionamiento en la zona. Dado que el ejército israelí ordenó el cierre de la mayoría de los hospitales cercanos, hay pocos otros lugares a donde enviar a los heridos.

“El problema es dónde enviar los casos una vez estabilizados, porque no tenemos un departamento de admisiones”, dice el director del hospital kuwaití, Jamal al-Hams.

Hasta ahora, Al-Hams dice que el hospital no ha recibido una orden de evacuación del ejército israelí.

“Mientras estemos en una zona segura según el mapa que han declarado las autoridades israelíes, continuaremos nuestro servicio y seguiremos recibiendo heridos”, afirma.

Mientras cientos de miles de palestinos recogen sus pertenencias y huyen, muchos en Rafah carecen de fondos suficientes para irse y dicen que han dejado su destino en manos de Dios.

En un edificio escolar abandonado que se ha convertido en refugio para palestinos desplazados en Rafah, ropa andrajosa cuelga para secarse de las ventanas y balcones de las aulas, y los niños juegan en el patio bombardeado, con basura esparcida a su alrededor.

Aya Kafarna, una enfermera que vive en la escuela, llegó allí después de haber sido desplazada seis veces.

“No tengo medios para volver a evacuar”, dice Kafarna. “Quiero conseguir un contenedor para cargar mis cosas, necesito al menos 1.800 shekels”, casi 500 dólares.

Kafarna se casó un mes antes de que comenzara la guerra. Quedó embarazada, pero abortó a los cuatro meses de embarazo. Ella culpa de su aborto espontáneo al constante desplazamiento.

Kafarna y su familia dicen que se ven obligados a quedarse.

La agencia de las Naciones Unidas para los refugiados palestinos, UNRWA, dijo que se estaba quedando sin alimentos y el martes anunció que suspendería la entrega de ayuda alimentaria en Rafah.

El director de planificación de la UNRWA en Rafah, Sam Rose, dijo que no tenían otra opción.

“La decisión se tomó esencialmente porque nos hemos quedado sin suministros”, dijo a -. “No tenemos nada en nuestros almacenes”.

Anas Baba informó desde Rafah. Hadeel Al-Shalchi informó desde Tel Aviv.