Ottawa –
Una empresa de telecomunicaciones china de propiedad estatal está pidiendo a un juez que detenga una orden federal para desinvertir su participación en una subsidiaria canadiense por preocupaciones de seguridad nacional mientras se desarrollan argumentos más amplios en los tribunales.
En una audiencia del Tribunal Federal hoy, un abogado que representa a la compañía argumenta que se justifica una suspensión temporal para evitar daños irreparables a China Mobile International Canada.
En enero, el gobierno federal informó a CMI Canadá de una revisión por motivos de seguridad, diciendo que la inversión podría resultar en que el estado chino aproveche el negocio canadiense para la interferencia extranjera y el compromiso de la infraestructura crítica.
El gobierno emitió una orden en agosto en la que ordenaba a la empresa matriz China Mobile que se desinvirtiera por completo, o que liquidara, el negocio canadiense en un plazo de 90 días, aunque desde entonces se ha concedido una prórroga.
CMI Canadá dice que el gobierno no tiene motivos para creer que la compañía comprometería la seguridad o se dedicaría al espionaje en nombre de Beijing.
El gobierno aboga por mantener la orden mientras avanza la solicitud de revisión judicial, diciendo que una suspensión representaría un riesgo inaceptable para la seguridad nacional.
Este informe de The Canadian Press se publicó por primera vez el 24 de noviembre de 2021.