Los trabajadores que confeccionan su ropa quieren salarios más altos. ¿Quién debería subirse al pony?

DHAKA, Bangladesh—Los ejércitos de personas que fabrican ropa para marcas occidentales (algunos de los trabajadores fabriles peor pagados del mundo) están protestando por mejores salarios, una nueva señal de que la era de la mano de obra ultrabarata y la ropa ultrabarata, en la que muchos las empresas dependen está cada vez más bajo presión.

Los trabajadores de la confección en Bangladesh ganan tan sólo 3 dólares al día, o alrededor de 75 dólares al mes. En los últimos días, decenas de miles se han negado a trabajar y han pedido que se aumente el salario mínimo a casi tres veces esa cantidad. Las manifestaciones se han disparado, con fábricas incendiadas y máquinas destrozadas. Unas trescientas fábricas se vieron obligadas a suspender sus operaciones.