Donald J. Trump ha estado pisoteando los precedentes presidenciales a diestra y siniestra mientras se encorva hacia Washington. Entre ellos: el primer candidato acusado de la historia. También: el primer candidato que quiere ser presidente para poder indultarse.
Si Trump es juzgado y merecidamente aplaudido antes de que tenga la oportunidad de perdonarse a sí mismo, hay un récord que no puede perseguir: convertirse en el primer candidato presidencial en hacer campaña desde una celda de prisión. Esa distinción pertenece al gran líder laborista Eugene V. Debs, el candidato del Partido Socialista en 1920.
Cuando el partido nominó a Debs ese año para su cuarta candidatura a la presidencia bajo su bandera, estaba pasando un mal rato en una penitenciaría federal en Atlanta. Su delito: violación de la Ley de Sedición, una medida que el presidente Woodrow Wilson, preocupado por la impopularidad de la entrada de Estados Unidos en la guerra en Europa en 1917, impuso la aprobación del Congreso.
El conflicto en Europa se había estancado después de tres años de matanzas. Ninguno de los bandos parecía capaz de ganar. Al final resultó que, se necesitó la intervención de nuevas tropas estadounidenses para inclinar la balanza a favor de los Aliados y poner fin a la guerra en noviembre de 1918. El costo: más de 116.000 estadounidenses muertos en acción.
Debs, un orador fogoso, se había opuesto a la intervención de Wilson desde el principio. En un discurso contra la guerra de junio de 1918 en Canton, Ohio, se convenció de meterse en un problema muy serio.
En su discurso dijo, entre otras cosas: “Siempre os han enseñado y entrenado para que creáis que es vuestro deber patriótico ir a la guerra y dejaros matar por orden suya. Pero en toda la historia del mundo, ustedes, el pueblo, nunca han tenido voz para declarar la guerra, y por extraño que parezca, el pueblo nunca ha declarado una guerra de ninguna nación en ninguna época”.
Cerca de mil ciudadanos fueron arrestados por violaciones de la Ley de Sedición de 1918 de Wilson. Esta ley, ratificada por la Corte Suprema de los Estados Unidos, prohibía todo “lenguaje abusivo destinado a causar desprecio, escarnio… con respecto a la forma de gobierno de los Estados Unidos o la Constitución… instando a cualquier reducción de la guerra con la intención de entorpecer su prosecución; defender, enseñar, defender o actuar apoyando o favoreciendo la causa de cualquier país en guerra con los Estados Unidos, u oponiéndose a la causa de los Estados Unidos”. Debs fue arrestado, juzgado y sentenciado a 10 años de prisión.
Así que ahora Trump (que estaría horrorizado de encontrarse en compañía de Debs) se presenta como otro mártir de la libertad de expresión por atacar, Entre otrosBiden y su “banda de matones de armario, inadaptados y marxistas”.
Si Trump se convierte en el segundo candidato presidencial estadounidense en hacer campaña desde una celda de prisión, Estados Unidos enfrentará una gran caída de Gene Debs.
2023-08-08 11:30:40
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