BEIJING — Los empleados de la fábrica de iPhone de Apple más grande del mundo fueron golpeados y detenidos en protestas por disputas contractuales en medio de controles antivirus, según testigos y videos en las redes sociales el miércoles, mientras aumentan las tensiones por la severa estrategia de Beijing contra el coronavirus.
Los videos que decían que fueron filmados en la fábrica en la ciudad central de Zhengzhou mostraban a miles de personas con máscaras frente a filas de policías con trajes protectores blancos con escudos antidisturbios de plástico. La policía pateó y golpeó a un manifestante con garrotes después de que agarrara un poste de metal que se había utilizado para golpearlo.
La frustración con las restricciones en áreas de China que cerraron tiendas y oficinas y confinaron a millones de personas en sus hogares durante semanas sin previo aviso se convirtió en protestas en algunas áreas. Los videos en las redes sociales muestran a los residentes en algunas áreas derribando las barricadas establecidas para hacer cumplir el cierre de los vecindarios.
El mes pasado, miles de empleados abandonaron la fábrica de iPhone operada por Foxconn Technology Group de Taiwán por quejas sobre condiciones de trabajo inseguras luego de casos de virus en las instalaciones.
El martes estalló una protesta por las quejas de que Foxconn cambió las condiciones para los nuevos trabajadores que se sintieron atraídos por ofertas de salarios más altos, según Li Sanshan, un empleado.
Li dijo que renunció a un trabajo de catering en respuesta a un anuncio que prometía 25.000 yuanes (3.500 dólares) por dos meses de trabajo. Li, de 28 años, dijo que los trabajadores estaban enojados después de que les dijeron que tenían que trabajar dos meses más con un salario más bajo para recibir los 25.000 yuanes.
“Foxconn lanzó ofertas de reclutamiento muy tentadoras, y vinieron trabajadores de todas partes del país, solo para descubrir que los estaban engañando”, dijo Li.
El gobernante Partido Comunista prometió este mes tratar de reducir la interrupción acortando las cuarentenas requeridas y haciendo otros cambios. Pero el partido dice que se apegará a su estrategia “cero-COVID” que tiene como objetivo aislar cada caso en un momento en que otros gobiernos están relajando los viajes y otras restricciones y tratando de vivir con el virus.
Las protestas han estallado a medida que aumenta la cantidad y la gravedad de los brotes en China, incluso en Beijing. Esta semana, las autoridades informaron las primeras muertes por COVID-19 en el país en seis meses.
Se han encontrado más de 253.000 casos en las últimas tres semanas y el promedio diario está aumentando, informó el gobierno el martes. Los líderes locales han respondido cerrando vecindarios e imponiendo otras restricciones que los residentes se quejan van más allá de lo que permite el gobierno nacional.
El miércoles, el gobierno reportó 28.883 casos encontrados en las últimas 24 horas, incluidos 26.242 sin síntomas. La provincia de Henan, donde Zhengzhou es la capital, reportó 851 en total.
El gobierno hará cumplir su política anti-COVID mientras “supera con resolución la mentalidad de parálisis y laxitud”, dijo un portavoz de la Comisión Nacional de Salud, Mi Feng.
La capital, Beijing, ha cerrado tiendas, restaurantes, edificios de oficinas y algunos complejos de apartamentos.
Shanghai y la ciudad sureña de Nanchang prohibieron a las personas de fuera de la ciudad visitar lugares públicos durante cinco días después de su llegada.
Foxconn dijo anteriormente que la fábrica de Zhengzhou utiliza una “gestión de ciclo cerrado”, lo que significa que los empleados viven en su lugar de trabajo sin contacto con el exterior.
La protesta duró hasta el miércoles por la mañana cuando miles de trabajadores se reunieron frente a los dormitorios y se enfrentaron a los trabajadores de seguridad de la fábrica, según Li.
Otros videos mostraban a los manifestantes rociando extintores contra la policía.
Un hombre que se identificó como el secretario del Partido Comunista a cargo de los servicios comunitarios apareció en un video publicado en la plataforma de redes sociales Sina Weibo instando a los manifestantes a retirarse. Les aseguró que sus demandas serían satisfechas.
Apple Inc. advirtió que las entregas de su nuevo modelo de iPhone 14 se retrasarían debido a los controles contra enfermedades en la fábrica. El gobierno de la ciudad suspendió el acceso a una zona industrial que rodea la fábrica, que según Foxconn emplea a 200.000 personas.
Foxconn, con sede en Taipei, Taiwán, no respondió a las solicitudes de información sobre la situación.
Nuevos informes anteriores decían que el partido gobernante ordenó a “cuadros de base” que reemplazaran a los empleados de Foxconn en Zhengzhou que se fueron. La compañía no respondió a las solicitudes de confirmación y detalles sobre ese arreglo.
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Zen Soo informó desde Hong Kong. Caroline Chen, asistente de noticias de AP, contribuyó.