Esta tarde se entregará en Dublín el primero de los tres trofeos europeos de la temporada. En la final de la Europa League, el Atalanta se enfrentará al Bayer Leverkusen, donde juega el suizo Granit Xhaka.
Los italianos del club afincado en Bérgamo jugarán su primera final en una Copa de Europa. El historial de la Dea es modesto, con sólo una Copa de Italia ganada en… 1963. Pero los hombres del entrenador Gian Piero Gasperini brillaron esta temporada, eliminando al Liverpool en cuartos de final y se clasificaron para la próxima Liga de Campeones.
El Bayer Leverkusen ganó la Copa de la UEFA en 1988 y perdió la final de la Liga de Campeones en 2002 contra el Real Madrid. Esta temporada, el club logró actuaciones históricas: se proclamó campeón de Alemania por primera vez y se mantuvo invicto durante las 34 jornadas de la Bundesliga.
Mejor aún, el equipo que dirige Xabi Alonso no ha perdido ni un solo partido en todas las competiciones. Por tanto, tiene la final esta tarde en Dublín y la de la Copa de Alemania, el sábado en Berlín contra el Kaiserslautern, para ampliar a 53 partidos su increíble racha de imbatibilidad.
/ATS