Roma: Al menos 10 personas murieron y otras cuatro siguen desaparecidas después de que las inundaciones repentinas azotaran la región de Marche en Italia, creando lo que un alcalde local describió como una “situación apocalíptica”. Violentas tormentas eléctricas sacudieron Marche y las áreas circundantes el jueves y viernes, provocando inundaciones repentinas que arrancaron árboles, destruyeron casas y arrastraron vehículos, informa la agencia de noticias Xinhua. Los oficiales de rescate dijeron que entre las cuatro personas desaparecidas se encontraba un niño de ocho años. Según Carlo Manfredi, alcalde de la ciudad de Castelleone di Suasa, una de las áreas más afectadas por las inundaciones, el niño se perdió después de que él y su madre escaparon de las inundaciones desde su automóvil.
Manfredi dijo que la madre sobrevivió, pero el niño se le escapó de los brazos. También desaparecieron a última hora del viernes una niña de 17 años y su madre, de 56. Las autoridades no revelaron información sobre la cuarta persona desaparecida. Según versiones en las redes sociales, decenas de personas lograron escapar de las inundaciones trepando a los techos o árboles.
Según informes noticiosos, al menos seis meses de lluvia cayeron en algunas áreas en el lapso de unas pocas horas. Se informó de daños materiales graves en Las Marcas y en la región vecina de la Toscana, y también se registraron fuertes lluvias en Umbría, Abruzzo, Molise y Lazio en el centro de Italia y Friuli Venezia Giulia, Lombardía y Liguria en el norte de Italia.
El presidente Sergio Mattarella y el primer ministro Mario Draghi emitieron declaraciones de solidaridad con los residentes de las zonas más afectadas. Draghi dijo el viernes que la región recibiría el apoyo financiero necesario para reparar los daños y establecer viviendas temporales para los desplazados por la tragedia.
En lo que va de año, el clima en Italia ha sido el más extremo registrado. El verano fue inusualmente cálido y seco, y los niveles de agua de los ríos del país cayeron a mínimos históricos, lo que redujo la producción agrícola en un tercio o más.
El Instituto de Ciencias Atmosféricas y Clima del Consejo Nacional de Investigación dijo en agosto que se esperaba que 2022 fuera el año más caluroso desde que comenzaron los registros en 1800. En julio, un enorme glaciar en las montañas Dolomitas se derrumbó, mató a 11 personas e hirió gravemente a otras ocho. . El mes pasado, violentas tormentas eléctricas devastaron partes del norte de Italia, provocando inundaciones y deslizamientos de tierra que causaron daños a la propiedad a gran escala.