La acusación del gran jurado contra Alec Baldwin abre dos caminos para los fiscales

SANTA FE, Nuevo México — Alec Baldwin se enfrenta una vez más a un delito grave de homicidio involuntario después de que un gran jurado acusó formalmente al actor en relación con el tiroteo fatal en 2021 de un director de fotografía en el set de una película del oeste en Nuevo México.

Baldwin, actor principal y coproductor de “Rust”, apuntó con un arma a la directora de fotografía Halyna Hutchins durante un ensayo en una película ambientada en las afueras de Santa Fe cuando el arma se disparó, matándola e hiriendo al director Joel Souza.

Un nuevo análisis del arma abrió el camino para que los fiscales reiniciaran el caso, después de desestimar un cargo de homicidio involuntario el año pasado. Una nueva acusación de una página presentada por el gran jurado el viernes alega que Baldwin causó la muerte de Hutchins, ya sea por negligencia o por “total desprecio o indiferencia” por la seguridad.

Los abogados defensores de Baldwin indican que lucharán contra el cargo, que conlleva una posible sentencia de prisión de hasta 18 meses.

Aquí hay algunas cosas que debe saber sobre el caso.

Baldwin puede presentar una declaración formal con o sin una lectura de cargos ante el tribunal, poniendo en marcha los preparativos para el juicio.

La acusación proporciona a los fiscales dos estándares alternativos para el cargo de homicidio involuntario contra Baldwin. Uno se basaría en el uso negligente de un arma de fuego.

Baldwin ha dicho que retiró el percutor del arma, pero no el gatillo, y que el arma disparó. Pero un análisis reciente del arma utilizada por Baldwin realizado por Lucien y Michael Haag de los Servicios de Ciencias Forenses en Arizona concluyó que “el gatillo tenía que apretarse o presionarse lo suficiente para liberar el martillo completamente amartillado o retraído del revólver de pruebas”. Michael Haag testificó ante el gran jurado esta semana como testigo, según la nueva acusación.

Un informe anterior del FBI sobre el análisis del arma realizado por la agencia encontró que, como es común con las armas de fuego de ese diseño, podría dispararse sin apretar el gatillo si se aplicaba fuerza a un martillo sin amartillar, por ejemplo, al dejar caer el arma. El arma finalmente se rompió durante la prueba.

Una segunda alternativa para los fiscales es demostrar más allá de toda duda razonable que Baldwin causó la muerte de Hutchins sin la debida precaución o “circunspección”, también definida como “un acto cometido con total desprecio o indiferencia por la seguridad de los demás”.

Los fiscales se negaron a responder preguntas el viernes después de pasar aproximadamente un día y medio presentando su caso ante el gran jurado.

El abogado defensor y ex fiscal John Day, con sede en Santa Fe, que no está relacionado con el caso, cree que la acusación brinda a los fiscales una posible oportunidad de abordar las obligaciones de seguridad de Baldwin como coproductor.

“No sabemos exactamente cuál es su teoría”, dijo Day. “Podría ser que estén incluyendo su papel básicamente como director ejecutivo de producción… al no tener un lugar de trabajo seguro y alguien muere y estás en la cima de la pirámide”.

La compañía Rust Movie Productions pagó una multa de $100,000 a los reguladores estatales de seguridad en el lugar de trabajo luego de una narrativa mordaz de fallas de seguridad en violación de los protocolos estándar de la industria, incluido el testimonio de que los gerentes de producción tomaron medidas limitadas o ninguna para abordar dos fallas de encendido en el set antes del tiroteo fatal.

Por otra parte, los fiscales especiales Kari Morrissey y Jason Lewis se están preparando para un juicio en febrero contra la armera de “Rust” Hannah Gutiérrez-Reed, quien se declaró inocente de homicidio involuntario y manipulación de pruebas en el caso.

Es probable que ese juicio se lleve a cabo de forma independiente y podría brindarles a los abogados de Baldwin información sobre las estrategias de procesamiento y el testimonio de testigos clave que probablemente también testificarán en el proceso contra Baldwin.

“Sus abogados seguramente seguirán de cerca el juicio del armero”, dijo Kate Mangels, abogada defensora y litigante de entretenimiento con sede en Los Ángeles, que no está involucrada en el caso. “Podría ofrecer una vista previa del enfoque de la fiscalía y del posible testimonio de los testigos”.

El caso de Baldwin fue asignado al juez del Tribunal de Distrito estatal con sede en Santa Fe, T. Glenn Ellington, especialista en casos penales. El caso Gutiérrez-Reed está supervisado por un juez diferente.

“Esperamos con ansias nuestro día en la corte”, dijeron Luke Nikas y Alex Spiro, abogados defensores de Baldwin.

Dos de los testigos vistos en el juzgado incluían miembros del equipo: uno que estaba presente cuando se disparó el tiro mortal y otro que había abandonado el set el día anterior por motivos de seguridad.

El subdirector y coordinador de seguridad de “Rust”, David Halls, no refutó el manejo inseguro de un arma de fuego en marzo pasado y recibió una sentencia suspendida de seis meses de libertad condicional. Aceptó cooperar en la investigación del tiroteo.

Nuevos documentos judiciales del viernes indican que la jefa de utilería de “Rust”, Sarah Zachry, firmó un acuerdo para cooperar con fiscales especiales a cambio de indulgencia. Zachry trabajó estrechamente para asegurar las armas y municiones en el set con Gutiérrez-Reed.

Mangels dijo que una acusación de un gran jurado de ninguna manera es una garantía de que los fiscales prevalecerán en el juicio.

“El simple hecho de recibir una acusación de un gran jurado no significa de ninguna manera que la fiscalía tenga un caso claro o incluso un caso sólido”, dijo.