SEÚL—Samsung Electronics ha planteado la posibilidad de invertir casi $ 200 mil millones para 11 nuevas plantas de fabricación de chips en Texas durante las próximas dos décadas, un mega derroche que, si se ejecuta, impulsaría drásticamente su punto de apoyo de semiconductores en los EE. UU.
El gasto propuesto por el gigante tecnológico de Corea del Sur se divulgó en documentos recientes presentados a la oficina del Contralor de Texas y se hizo público el miércoles. Una posible motivación es la expiración a fin de año de un programa de incentivos del estado de Texas que ofrece exenciones de impuestos a la propiedad durante 10 años para grandes inversiones.