MAHABALIPURAM, India—B. Vivekanandhan, el propietario de 51 años de un restaurante popular llamado Moonrakers, compite ferozmente por los clientes en esta ciudad vacacional del sur de la India. Tan ferozmente, de hecho, que los puños han volado.
Sus principales enemigos son su propia carne y sangre. Su hermano mayor opera una marisquería llamada Moonwalkers al otro lado de la calle. Justo en el mismo carril, su hermano menor dirige Moonrocks. Los menús son casi idénticos.