Rin, Danubio, Elba: los principales ríos de Alemania se controlan periódicamente. Sin embargo, hasta el momento hay pocos datos sobre los pequeños arroyos. un nuevo ARD-La campaña de participación quiere cambiar eso.
El Mühlbach es un pequeño río en Mecklemburgo-Pomerania Occidental y durante presentador ARD Jessy Wellmer tiene muchos recuerdos: “El murmullo de este arroyo es la banda sonora de mi infancia”. Allí el periodista pasaba veranos enteros pescando cangrejos de río en las aguas del Mühlbach junto con otros niños. Pero ahora, cuando Wellmer visita el arroyo, ya no se encuentran los cangrejos de río: “Voy allí de vez en cuando y me doy cuenta: el aspecto de este arroyo ha cambiado bastante”.
Muchos pequeños arroyos en Alemania, casi inexplorados
Los grandes ríos de Alemania deben controlarse periódicamente. Con ello también se pretende aplicar la Directiva marco europea sobre el agua del año 2000. Según esto, todas las aguas superficiales deben estar en buen estado químico y ecológico a más tardar en 2027. Pero los grandes ríos todavía están lejos de alcanzar este objetivo: según la Agencia Federal de Medio Ambiente (UBA), el 90 por ciento de nuestros ríos no se encuentran en buenas condiciones ecológicas.
Sin embargo, este seguimiento no incluye los pequeños arroyos con una superficie de captación inferior a diez kilómetros cuadrados. Estos pequeños arroyos y afluentes representan alrededor del 70 por ciento de toda la red fluvial de Alemania, pero hay pocos datos fiables sobre su estado.
Ciencia Ciudadana: Ciencia a través del voluntariado
En este contexto, el Centro Helmholtz de Investigación Medioambiental (UFZ) de Leipzig lanzó hace tres años el proyecto de ciencia ciudadana FLOW. Junto con más de 900 ciudadanos, la bióloga Aletta Bonn de la UFZ, entre otros, recopiló información: ¿Cómo es la orilla del río, a qué huele el agua, de qué color es, cómo suena el arroyo?
Ciencia ciudadana: el proyecto FLOW
La ciencia ciudadana es ciencia gracias a la ayuda de voluntarios, incluidos investigadores no profesionales. Por un lado, la participación de muchas personas tiene como objetivo proporcionar datos que de otro modo serían difíciles de recopilar para los institutos de investigación. Por otro lado, la ciencia puede contribuir a la educación ambiental a través del voluntariado. Voces críticas cuestionan los resultados recopilados por los profanos, diciendo que podrían ser inexactos. En el marco del proyecto FLOW (investigando ríos, creando conocimiento juntos) del Centro Helmholtz de Investigación Ambiental (UFZ) y el Centro Alemán para la Investigación Integrativa de la Biodiversidad (iDiv), los voluntarios aprendieron a evaluar el estado ecológico de los arroyos y a documentarlo. Según los iniciadores, los datos recopilados respaldarán la investigación sobre el agua y constituirán la base para medidas específicas de protección y renaturalización. El Ministerio Federal de Educación e Investigación (BMBF) financió el proyecto FLOW durante unos tres años, hasta principios de 2024.
La campaña de participación de ARD tiene como objetivo ampliar los tesoros de datos
Esta “ciencia con la ayuda de voluntarios” se llevará a cabo ahora en el marco del ARD– Se continuará con la campaña de participación #nuestrosríos. La atención se centra en la estructura de la corriente. De esto el biólogo Bonn puede sacar conclusiones sobre el estado ecológico:
“Cuando el arroyo tiene una hermosa curva, ofrece muchos hábitats diferentes para animales y plantas. Éstos son una fuente de alimento para peces y pájaros”. Así funciona el arroyo como un ecosistema sano y equilibrado.
Más de la mitad de los ríos no están en buen estado
De hecho, la evaluación inicial de los datos del proyecto FLOW de más de 130 arroyos es aleccionadora, dice la bióloga Aletta Bonn. Más de la mitad de los arroyos muestreados, más del 60 por ciento, se vieron gravemente afectados por pesticidas. Esto tiene un impacto en microorganismos como gusanos, caracoles o larvas de caddis, especies que desaparecen lentamente cuando las concentraciones de pesticidas son demasiado altas.
Las larvas de mosca caddis son un indicador importante de la salud de los arroyos. Al mismo tiempo, los datos muestran que la morfología de las riberas de más del 60 por ciento de los arroyos no se encuentra en buenas condiciones ecológicas. Los cuerpos de agua están urbanizados, no hay vegetación de ribera, las orillas están empobrecidas. Los bancos de vegetación no sólo aseguran la filtración del agua de los ríos, sino que también proporcionan hábitat y refugio para diversas especies como anfípodos e insectos.
Campaña de participación de ARD #ourrivers
Puedes participar hasta el 30 de septiembre de 2024 en DasErste.de/unsereFluesse.de. Envíanos fotos y responde el cuestionario. Se espera que en otoño publiquemos los resultados de la campaña en toda Alemania.
Campaña de participación de ARD como importante aporte al medio ambiente
El investigador Bonn ve un gran potencial en la ciencia ciudadana para los ríos pequeños: “Creo que necesitamos los ojos y los oídos de todos, pero también las habilidades, los conocimientos y el compromiso de todos”. Es una contribución importante al medio ambiente.
El moderador Wellmer también participa y quiere enviar fotos y observaciones del Mühlbach a #ourrivers: “Los ríos son nuestra salvación. Así que vaya al campo y eche un vistazo al arroyo”.