SEÚL — Siempre fue más una cuestión de cuándo, no si, Corea del Norte volvería a las provocaciones con armas. Ahora que lo ha hecho, el régimen de Kim Jong Un está listo para desenvainar las nuevas armas que ha desarrollado silenciosamente en los últimos años.
Primero fue una prueba de misiles de crucero en marzo que el presidente Biden restó importancia. Días después, Pyongyang lanzó un par de misiles balísticos que Biden y otros líderes denunciaron como una violación de las resoluciones del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas.
Corea del Norte en las últimas semanas también participó en una mayor actividad en instalaciones sospechosas de fabricar plutonio y uranio, materiales clave para las armas nucleares, según imágenes de satélite analizadas por el Centro de Estudios Estratégicos e Internacionales, un grupo de expertos en Washington, DC.
Además, las imágenes satelitales de un puerto en la costa este de Corea del Norte mostraron movimiento cerca del muelle de lanzamiento de submarinos del puerto, lo que indica que el régimen pronto podría lanzar un nuevo submarino de lanzamiento de misiles, según un análisis de 38 North, un sitio web centrado en Corea del Norte. .
Las actividades sugieren que el régimen está volviendo a un baile delicado pero familiar.
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