Reino Unido declara emergencia nacional por ola de calor mientras Europa enfrenta temperaturas récord

Bob Ward, director de comunicaciones del Instituto de Investigación Grantham sobre el Cambio Climático y el Medio Ambiente, dijo que temperaturas como estas están “muy por encima de todo lo que hemos visto antes”.

El Sr. Ward estimó que la ola de calor de esta semana podría provocar 2.000 muertes. El año pasado, un año en el que, según el Sr. Ward, las temperaturas “no se parecen en nada a las que estamos viendo ahora”, 1600 personas murieron como resultado de las olas de calor en el Reino Unido.

“El Reino Unido todavía lucha por lidiar con el clima cálido y todavía se considera un país frío. Períodos como este muestran cuán vulnerable es el país”, dijo.

El récord actual para el Reino Unido es de 101,6 grados Fahrenheit en julio de 2019.

Las escuelas cerraron temprano el lunes, los campamentos de verano cerraron y los hospitales cancelaron las citas de rutina porque anticiparon un aumento en los problemas médicos relacionados con el calor. El gobierno aumentó la capacidad de los servicios de ambulancia y los sistemas de salud para ayudarlos a responder, según el secretario de Salud del Reino Unido, Steve Barclay.

Network Rail, que opera la red de trenes del país, instó a los clientes a viajar solo si es necesario, cerrando algunas líneas ferroviarias y reduciendo los límites de velocidad en otras para evitar que los rieles calientes se doblen. El metro de Londres también redujo el servicio en algunas de sus líneas, advirtiendo que las altas temperaturas podrían afectar a los equipos.

“Cerrar la línea al tráfico siempre es el último recurso, pero es lo correcto para mantener a las personas seguras el martes dado el pronóstico de una ola de calor sin precedentes”, dijo Sam MacDougall, director de operaciones de Network Rail. “Las temperaturas pronosticadas están muy por encima de aquellas para las que está diseñada nuestra infraestructura, y la seguridad debe ser lo primero”.

El calor extremo ha causado interrupciones en los aeropuertos del Reino Unido, y el Aeropuerto Internacional de Londres Luton suspendió todos los vuelos debido a un defecto en la superficie de la única pista del aeropuerto. “Las temperaturas extremas provocaron que se levantara una pequeña sección de la pista”, dijo un portavoz de Luton. Los ingenieros estaban trabajando en las reparaciones y buscaban reanudar los vuelos lo más rápido posible, dijo el aeropuerto.

El calor llevó a la Royal Air Force británica a detener los vuelos hacia y desde su base aérea más grande, Brize Norton. “Durante este período de temperaturas extremas, la seguridad de los vuelos sigue siendo nuestra principal prioridad, por lo que las aeronaves están utilizando aeródromos alternativos de acuerdo con un plan establecido desde hace mucho tiempo”, dijo un portavoz de la RAF.

El resto de Europa, particularmente en el sur, también se está calentando con temperaturas récord.

En los últimos días, los incendios forestales han arrasado países del sur de Europa y miles han sido evacuados de sus hogares. La Comisión Europea ha desplegado 11 aviones de su flota de extinción de incendios en cuatro países, respondiendo a solicitudes urgentes de asistencia internacional en Portugal, Albania, Francia y Eslovenia.

“Las condiciones climáticas extremas y las nuevas amenazas emergentes han puesto a prueba la capacidad de los estados miembros para ayudarse mutuamente, especialmente cuando varios estados miembros enfrentan el mismo tipo de desastre simultáneamente”, dijo Balazs Ujvari, portavoz de la oficina de Gestión de Crisis y Ayuda Humanitaria de la Comisión Europea. .

La semana pasada, las temperaturas alcanzaron los 115 grados en Portugal, las más altas jamás registradas por el Instituto Portugués del Mar y la Atmósfera, mientras miles de bomberos combatían 13 incendios forestales. El calor extremo ha matado a 659 personas en la última semana, según el Ministerio de Salud portugués.

En el suroeste de Francia, los bomberos seguían luchando el lunes para contener los incendios forestales que estaban fuera de control. Los incendios han destruido más de 35.336 acres de bosque de pinos durante la semana pasada en la región de Gironde, cerca de la ciudad de Burdeos, lo que obligó a la evacuación de más de 16.000 personas, incluidas muchas que pasaban sus vacaciones en campamentos, dijeron las autoridades locales. Alrededor de 1.700 bomberos y nueve aviones que lanzan agua se han desplegado en el área, agregaron.

Se podían ver gruesas columnas de humo cerca de la Duna de Pilat, la duna de arena más alta de Europa y un popular destino turístico en el área de la Bahía de Arcachon.

El pico de esta ola de calor en Francia se esperaba el lunes, dijo el meteorólogo Météo-France, pronosticando temperaturas entre 104 y 107,6 grados Fahrenheit.

“El día podría convertirse en uno de los más calurosos jamás registrados en Francia”, dijo. Las temperaturas en el puerto de Brest en Bretaña, en el noroeste del país, podrían acercarse a 104 grados sin precedentes, dijo.

Francia ha emitido alertas rojas, la más alta posible, para varias regiones, y se insta a los residentes a estar extremadamente atentos. No ha habido reportes de heridos hasta el momento.

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