El presidente sirio Bashar al Assad se ha reunido con Vladimir Putin en Moscú, su primera reunión en la capital rusa desde 2015.
Putin felicitó a su homólogo por ganar las elecciones presidenciales de mayo, según el Kremlin.
La elección, en la que Assad se dice que ganó el 95% de los votos – fue descartado como una farsa por la mayoría de los países occidentales.
Putin también aprovechó la reunión del lunes para elogiar el renovado control del presidente Assad sobre el país después de una década de enfrentamientos.
El Kremlin lo citó diciendo: “Los terroristas habían sufrido un daño muy grave, y el gobierno sirio, encabezado por usted, controla el 90% de los territorios”.
Sin embargo, según los informes, advirtió que las fuerzas extranjeras desplegadas en Siria sin una decisión de la ONU fueron un obstáculo para su consolidación.
La reunión entre los dos líderes fue la primera desde una cumbre en la capital siria, Damasco, en enero de 2020.
El presidente Assad también agradeció a Putin por enviar ayuda a Siria y los esfuerzos para detener la “propagación del terrorismo”, dijo el Kremlin.
Elogió lo que llamó el éxito de los ejércitos ruso y sirio en la “liberación de los territorios ocupados” de su país y describió las sanciones occidentales como “antihumanas” e “ilegítimas”.
La televisión estatal siria dijo que más tarde se unieron a los líderes el ministro de Relaciones Exteriores de Siria y el ministro de Defensa de Rusia para discutir sobre la lucha contra el terrorismo y las relaciones mutuas.
Cientos de miles han muerto en la guerra de Siria, que comenzó en 2011 después de las protestas pacíficas provocadas por la Primavera Árabe, mientras que millones han huido del país o han sido desplazados internamente.
El apoyo de Rusia ha ayudado al presidente Assad a recuperar casi todo el territorio perdido durante el conflicto.
Cientos de sus tropas permanecen en Siria y los activistas de la oposición dicen que aviones rusos han estado llevando a cabo ataques recientemente en la provincia de Idlib, la última gran área rebelde.
Si bien la crisis de COVID ha ayudado a sacar el conflicto de los titulares, la situación sigue siendo sombría y los combates continúan en algunas áreas, la inseguridad alimentaria y la economía arruinada.
La ONU dijo este mes que 13,4 millones de sirios todavía necesitaban ayuda e instó a la necesidad de un mayor acceso humanitario.