Las sanciones a la aviación en competencia y la reducción del espacio aéreo disponible para viajes comerciales en Rusia y Europa del Este están agregando presión a la industria de la aviación mundial, que apenas comienza a emerger de dos años de restricciones de viaje relacionadas con Covid-19.
Las aerolíneas han tenido que desviar los aviones para evitar Ucrania y partes de Rusia, mientras que un puñado de países, incluido el Reino Unido, han prohibido la entrada de aviones rusos a su espacio aéreo, lo que provocó prohibiciones recíprocas por parte de Moscú en la mayoría de los casos. Sanciones occidentales más severas sobre Rusia y un conflicto cada vez mayor en Ucrania amenazan con cortar más espacio aéreo ruso, un corredor crucial para muchos vuelos de larga distancia, particularmente entre Europa y Asia. Mientras tanto, el fabricante de aviones Airbus SE podría verse atrapado en restricciones sobre las ventas de aviones y repuestos. La Unión Europea planea prohibir tales ventas como parte de las sanciones destinadas a castigar al presidente ruso, Vladimir Putin, por la invasión de Ucrania.